Definitivamente, Google Analytics
puede llegar a ser una herramienta muy poderosa para nuestro negocio
(si sabemos explotar todo su potencial). No obstante, para que la analítica web
se convierta en nuestra ventaja competitiva, es importante que la
implementación de Google Analytics esté totalmente optimizada.
No implementes el código de seguimiento por duplicado
En gestores de contenidos como WordPress
implementar el código de seguimiento de Analytics es tarea sencilla:
normalmente basta con introducir la ID de Analytics (del tipo UA-XXXX-X) en uno de los muchos plugins que lo permiten y, en ocasiones, incluso en el propio tema de la página.
El problema es que muchas veces se
comete el error de implementarlo por duplicado. ¿El problema? Que datos
como el porcentaje de rebote se ven alterados (por ejemplo, mostrando
tasas de rebote cercanas al 0%). Por ello, conviene chequear que la
implementación del código de Analytics se ha realizado correctamente.
Utiliza los filtros para excluir el tráfico orgánico
¿Te interesa contabilizar las veces que
entras en tu blog? ¿O el número de veces que desde tu oficina accedéis a
la página web? Estas visitas lo único que hacen es distorsionar los
datos obtenidos (en especial en aquellos portales con un volumen de
tráfico reducido) por lo que se recomienda configurar un filtro para
excluir tu IP o la de tu oficina.
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