¿Se siguen publicando fotos de niños en las redes sociales? La
pregunta es retórica, claro que sí, podemos comprobarlo en cualquier
momento y en cualquier red social. Aunque parece que los usuarios van
tomando conciencia lentamente sobre los riesgos que esas publicaciones
pueden tener, por desgracia queda mucho por hacer.
Muchos ya sabemos que tras las redes sociales se ocultan personas con
perversas intenciones y que pueden utilizar lo que publicamos para
recabar información acerca de nosotros y nuestros niños facilitándoles
así sus planes.
No podemos vivir ajenos a la realidad y pensar que a nosotros no nos
va a ocurrir. Cada vez se producen más delitos en Internet relacionados
con la privacidad de las personas y son los niños los que forman parte
del sector más vulnerable.
Las fotos en sí, modificadas o no, pueden ser utilizadas para burlas y escarnios, lo que frecuentemente degenera en ciberacoso y sus graves consecuencias. También son conocidos los casos en los que se manipulan este tipo de fotos para alimentar álbumes de contenido sexual infantil.
Además, pensemos en el riesgo que conlleva la información que se
puede desprender de la imagen, como quiénes son los familiares,
costumbres, status social, lugar de residencia, horarios, colegio, etc.
Información muy apetecible para depredadores sexuales y otros
delincuentes que actúan en la vida real.
No obstante, tampoco podemos afirmar que la publicación de alguna
imagen de nuestros hijos en las redes sociales sea una total
imprudencia. Si seguimos ciertas normas para asegurar su anonimato y utilizamos adecuadamente las herramientas que regulan la privacidad, reduciremos los riesgos hasta hacerlos prácticamente despreciables.
¿Vas a publicar fotos de tus hijos?
- Evita que en la foto aparezca información que permita identificarlo o localizarlo, como la vivienda, el colegio, uniformes escolares, parques frecuentados, actividades extraescolares, coche y matrícula, etc.
- No publiques con geolocalización ni permitas que en las imágenes quede almacenada la posición geográfica desde el móvil.
- No etiquetes las imágenes con su nombre o podrían aparecer en el buscador Google solo con escribirlo.
- Vigila la privacidad de las imágenes publicadas, comparte solo con aquellas personas de total confianza que sabes que no van a hacer un uso irresponsable. Si quieres cederlas a un número pequeño de personas, mejor utiliza algún otro medio, como el correo electrónico o la posibilidad de que se las descarguen desde “la nube”.
- No publique para todos tus amigos o amigos de amigos o la probabilidad de que se le pierda el control será mucho mayor.
- Nunca subas fotos de niños desnudos.
- No compartas “la vida entera del niño”, quizá cuando sea mayor no lo apruebe o pueda sentirse avergonzado.
- No publiques las imágenes de otros niños, seguro que no tienes el consentimiento de sus padres por escrito. Valora la posibilidad de pixelar o difuminar su rostro.
- No esperes de tus hijos un uso responsable de sus imágenes en la Red cuando cumplan 13 ó 14 años si no lo han visto en su propia casa mientras crecían.
- Haz saber a tus familiares y amigos que te tomas en serio la privacidad de las fotos, pide que no las compartan.
Y recuerda que si una imagen llega a hacerse pública en Internet, ya nunca te será posible eliminarla por completo.
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